Por Mario Núñez Muñoz
Hace unos días tuvimos la ocasión de asistir a la Cena Sabor Capital, organizada por la Asociación de Hoteles de Santo Domingo, en la cual participaron doce de sus asociados con sus respectivos chefs ejecutivos a la cabeza, presentando cada uno un bocadillo al estilo micrococina. Se realizó en el Hotel Barceló Lina de Santo Domingo y el resultado fue muy positivo en varios aspectos.
En esta, su segunda edición, fue posible observar notorios avances respecto a la anterior. En primer lugar el tipo de montaje, esta vez se puso a los chefs en primer plano, con sus respectivas estaciones, personal de cocina y a la vista de todos. Esto, además de destacar a los cocineros, permitió a los comensales una interacción más distendida, agradable y entretenida, amenizada por la banda de Nicole Santiago y por los vinos Barefood.
Otro aspecto que mejoró fue la forma de degustación. Los comensales pudieron literalmente probarlo todo, obteniendo así un panorama representativo de la calidad, creatividad, y servicios gastronómicos que ofrecen los hoteles de la capital.
Pero donde más se notaron avances fue en el diseño y ejecución de las degustaciones. Nuestra apreciación general es que algunos aprovecharon muy bien la ocasión, el escenario y la plataforma que significa el trabajo de la AHSD. Destacamos aquí los que nos parecieron más significativos por sabor y presentación.
El más solicitado de la noche fue el Chef Alberto Martin del Hotel El Embajador. El Chef del año 2014 en los Premios Nacionales de Gastronomía y también ganador en mejor presentación en GastroFest 2015, demostró la razón de sus galardones. No solo presentó un plato bello, complejo y sabroso, también dio una lección de profesionalismo, humildad y resistencia: montó el mismo todos los platos que ofreció su estación. No podemos sino aplaudir su actitud y su sentido de la colaboración.
El dueño de casa no se quedó atrás; el Chef Alfredo Cruz del Hotel Barceló Lina encantó a los comensales por el sabor de su plato “Luna de ternero flambeado” El sabroso guiso de carne fue memorable y muy comentado entre los asistentes. Entendemos que Cruz es uno de los talentos emergentes que puede contribuir todavía más al desarrollo de la gastronomía dominicana.
En los postres destacamos el trabajo del Chef Luis Eduardo Ramos del Hotel Holliday Inn Crowne Plaza, quien presentó el platillo “Cinco etapas del chocolate” , con un adecuado balance de presentación y sabor. Aromas, texturas y sabores muy bien pensados y ejecutados hicieron la diferencia.
Desde el punto de vista culinario, aparte de los platos comentados, nos parece que los cocineros de los hoteles de la ciudad pueden y deben arriesgarse más con los sabores. A los comensales y en especial a los turistas que nos visitan es necesario sorprenderles para que comenten nuestra gastronomía y la recomienden.
La cena Sabor Capital tiene además una razón solidaria, una buena causa. Los beneficios se destinan a un programa de becas que mantiene la Escuela Técnica Hotelera Serranías de Jarabacoa, cuyas beneficiarias son jóvenes de escasos recursos de diferentes lugares del país, que en un régimen de internado reciben una completa formación profesional, ética y moral. El buen comer aquí se relaciona directamente con el buen hacer.
Felicitamos a Arvey Benavides, a Lina Matos, al Comité de A&B y a todo el equipo de colaboradores de la Asociación de Hoteles de Santo Domingo, por esta segunda demostración de que cuando se quiere, se puede. Agradecemos también a todas las empresas, instituciones y personas que aportaron de distintas formas para hacer realidad esta cena.
MNM
